El pilar para la consolidación de la filosofía educativa del Colegio Bilbao, fue, sin duda, el Maestro Vicente Carrión Fos, quién influyó profundamente en el ejercicio y la prolífica trayectoria académica del profesor Tomás Bilbao Durán, fundador del Colegio Bilbao. Carrión fue el primer formador de maestros del colegio, fue la guía fundacional del ayer que explica el esquema actual y que sigue sirviendo de inspiración para el mañana.
Vicente Carrión fue un gran visionario, adelantado a su época, su claridad para delinear una filosofía educativa que pone en el centro a la persona humana, sostenida por una metodología congruente con sus principios y valores sentó las bases del éxito del colegio y constituye una ventaja comparativa que hace a nuestro modelo educativo como único en el medio.
En él, había perfecta congruencia entre la filosofía, sus métodos, su discurso y su acción. Sus ideas están más vigentes que nunca pues su validez axiológica es universal e inmutable. Esto se refleja perfectamente como pautas fundamentales de nuestro sistema.
Vicente Carrión no sólo fue un teórico que generó doctrinas pedagógicas, tuvo gran éxito durante varias generaciones con sus alumnos y formando maestros, con su ejemplo logró, como nadie, enaltecer, resignificar y dignificar la labor docente.
Desde la Escuela de la Ciudad de México tocó el espíritu de sus alumnos y colegas, formó generaciones enteras de profesores que siguen entregados apasionadamente a la noble labor de seguir su enseñanza formativa. Sus principios, valores, congruencia y el tino para hallar las fórmulas para hacer realidad las aspiraciones de su ideario, centrado en el humanismo, la formación integral del individuo, lo llevó a desarrollar su propia estrategia y filosofía educativa.
Este esquema si bien se ha ido perfeccionado con los años, manteniendo cierta flexibilidad dialéctica y ajustándose a la realidad cambiante y las mutaciones intrínsecas al devenir histórico del país, y del mundo, conserva una regla básica como punto de partida, el trato respetuoso y digno como eje fundamental de toda interacción. En este colegio, con el liderazgo del profesor Tomás Bilbao, profesamos el absoluto respeto a la diversidad, aspiramos al estímulo del pensamiento crítico y vivimos intensamente el amor por la naturaleza.
Tomás conectó a un gran número de personas de distintas generaciones, promoviendo la superación humana y el respeto a la Naturaleza para lograr un mundo mejor, a conectar emoción y razón y a buscar siempre ser más parte de las soluciones que de los problemas.
Colegio Bilbao: 4 Pilares:
FILOSOFÍA EDUCATIVA
Nuestra filosofía educativa, en apego a la enseñanza formativa que profesó Don Vicente Carrión Fos y que fue promovida por él y el profesor Tomás Bilbao desde el origen del Colegio Bilbao, tiene cinco principios fundamentales:
1) El respeto absoluto a la forma de aprender de cada individuo en armonía con su edad y sus capacidades (basada en la teoría del desarrollo cognoscitivo y afectivo de Jean Piaget)
2) Que todo educando participe en la búsqueda del conocimiento y descubra este último en función de su inteligencia y con base en sus intereses y motivaciones.
3) Que todo educando sea retado positivamente para ser mejor, en forma integral, por facilitadores que sean ejemplo y afectivamente cercanos.
4) Lograr la interacción social necesaria para que todo educando tenga un desarrollo socio-afectivo positivo, enmarcado en las normas y principios del colegio.
5) La enseñanza formativa que provoca aprendizajes significativos útiles tendientes al bienestar integral de los alumnos, va más allá del énfasis en la transmisión de información y la memorización de datos, educamos alumnos para la vida buscando su felicidad, superación constante y equilibrio en las diversas dimensiones de su desarrollo pleno.
Esto promueve un desarrollo humano, académico integral y multidisciplinario, que forma personas exitosas, capaces de construir relaciones interpersonales asertivas, que se adaptan a situaciones nuevas, enfrentan y conquistan retos, alcanzan bienestar individual y tienen impacto positivo en su entorno.
Los procesos educativos colocan al alumno en el centro; el maestro es un facilitador que guía su aprendizaje significativo; el diálogo es el recurso primordial; parte de un prerrequisito de respeto fundamental, estimula la curiosidad científica para promover el método del descubrimiento; el conocimiento se construye, en un proceso colectivo, siempre considerando las particularidades y las específicas necesidades individuales. El proceso transforma a los involucrados en lo individual y lo colectivo, en dos vías, los profesores no son poseedores de una verdad absoluta que inculcan en jarrones vacíos que se llenan para adiestrarlos en la repetición mecánica todo lo que se les dice.
No se enseña al ave a nadar, ni al pez a volar, no se mete en un molde al educando, se le brinda la oportunidad de encontrar y desarrollar sus gustos y talentos, para hallar su vocación, su esencia, su personalidad y su bienestar integral. Se estimula el pensamiento crítico y se busca una actitud propositiva que identifique los problemas y no se quede ahí, sino que lo motive a participar de las soluciones.
Por supuesto, se cumple con un rigor y una exigencia académica que permite a nuestros egresados tener la información suficiente y ser aceptados en las mejores universidades, pero el perfil de nuestros graduados y su formación los hace únicos. La educación y la formación de nuevas generaciones es mucho más que el dominio de información, los coleccionistas de datos no logran superar el poder de un click con acceso a redes. Nuestros alumnos adquieren una dimensión social poco común en jóvenes de estas edades, su pensamiento crítico propositivo es susceptible de ser expresado esgrimiendo argumentos convincentes en marcos de respeto, hemos sido testigos de cómo la visión integral formativa nos ha dotado y ofrece exitosos ejemplos de exalumnos destacados en diversos ámbitos, artísticos, culturales, científicos, deportivos, políticos, etc. todos ellos compartiendo un particular sello de un enorme e innegable aprecio por la naturaleza, solo explicable por el ambiente provocado por la pasión de los promotores de estos valores en instalaciones privilegiadas en medio del bosque.
Nuestros alumnos participan de la construcción del conocimiento, el descubrimiento del saber, son educados para la vida, no para hacer esfuerzos memorísticos y resolver exámenes, buscan su bienestar integral y aprenden a procurar un equilibrio emocional. Su interacción con los demás y con su entorno, los lleva a incidir en mejoras de trascendencia, los mueve a involucrarse decididamente en la resolución de conflictos y a pensar más allá de los intereses particulares y efímeros.
Todos los miembros de la comunidad constituyen una gran familia, las relaciones interpersonales y todas las interacciones se dan más en forma horizontal que en relaciones jerárquicas tradicionales de supra a subordinación. Existe un prerrequisito de confianza, respeto y admiración mutua, buscando siempre aprender de los demás, reconocer la importancia del esfuerzo y alcanzar la satisfacción que se obtiene con los logros y ser cada vez mejores personas para construir sociedades más justas y con mayor bienestar.
En el Colegio Bilbao tenemos la firme convicción de seguir este modelo que continuamos defendiendo, estamos plenamente identificados con sus valores y principios, compartimos el sueño de Vicente Carrión y de Tomás Bilbao de hacer posible una educación humana, sensible, asertiva, que no inhiba sino que promueva la creatividad, que sea integral, que genere lazos y sentido de identidad, pertenencia y orgullo de permanecer a una comunidad incluyente, solidaria y positiva, en la que todos juntos busquemos hacer un mundo mejor, con superación humana y respeto a la Naturaleza.
SENTIDO HUMANÍSTICO
Somos un grupo de personas que unen sus esfuerzos para desarrollar un proyecto educativo esencial y originariamente humanístico y que se unen alrededor de lo positivo, de horizontes francos y llenos de esperanza, con bellos paisajes de campos fértiles ávidos de ser surcados con trabajo constante y honesto para depositar junto con la semilla nuestra mejor apuesta por que germine y florezca la superación del género humano.
Para el Colegio Bilbao el principio y fin de toda actividad son los seres humanos que forman parte de nuestra comunidad. El proyecto educativo contempla un ciclo perfecto que inicia desde preescolar y que concluye en la graduación de preparatoria, brindando a la sociedad personas con plena conciencia, clara identidad y compromiso social.
Existe un sentido de grupo y una relevancia de cada individuo único e irrepetible, al que respetamos y queremos que tenga todos los elementos a su alcance para su pleno desarrollo integral.
No buscamos el desarrollo parcial de alguna de sus facetas sino ofrecer una amplia gama de alternativas para que pueda encontrar sus fortalezas, gustos, talentos y pasiones, atenuar debilidades y dar herramientas útiles para construir mejores interacciones y aspirar a mejores desenlaces en su ejercicio diario, profesional y afectivo, que se traduzcan, al final del día, en mejores desenlaces en sus comunidades y ámbitos de acción.
Se busca dotar de conocimientos y herramientas necesarias para aspirar al éxito académico y laboral pero buscando mucho más que eso, se busca promover la enseñanza formativa que nos lleve a que al final del ciclo graduemos a jóvenes con valores, comprometidos con la sociedad, que amen su país, que luchen por hacer diferencias en la aspiración de construir un mejor entorno, que busquen el punto de convergencia entre los ideales y la realidad, que aprendan a tratarse siempre con respeto sin dejar de ser críticos, que sepan manejar sus emociones, que sean propositivos y proactivos para participar de las soluciones y no quedarse en identificar los problemas.
Creemos que cuerpo, mente y espíritu deben desarrollarse en forma equilibrada, promovemos actividades deportivas, culturales, creativas, artísticas, científicas, tecnológicas, ambientales, sociales, etc.
El respeto absoluto a la dignidad de la persona, su forma de pensar, nos lleva a fomentar interacciones propositivas, a buscar el diálogo, a aprender a disentir y procesar de manera responsable las diferencias ante las cuáles siempre debemos construir puentes.
Todos los miembros de la comunidad están vinculados por correlativas relaciones de respeto, enlazados con deberes y derechos recíprocos, asumiendo cada uno la responsabilidad que le corresponde y exigiendo de los demás la observancia de lo propio. Lo anterior crea un ambiente, un estilo que establece la relación entre el colegio y sus alumnos y que determina otras relaciones como las del colegio con los padres, o con el personal. Todas ellas observan un conjunto de premisas que conforman el deber ser o el deber accionar de los miembros del colegio, lo que llamamos: “trato” y lo que inspira todos los reglamentos, programas y estrategias educativas.
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Buscamos garantizar ambientes de confianza, alegría y seguridad dentro y fuera de las aulas para propiciar una apertura tendiente a la comprensión recíproca entre todos los miembros de la comunidad, pero principalmente entre académicos y estudiantes. Sensibles y respetuosos del ritmo del desarrollo individual, tanto emocional como intelectual de los alumnos, favoreciendo su integración a la vida social, preparando seres felices y funcionales.
El modelo educativo pretende hacer posible la tranquilidad emocional que permita a cada alumno trabajar a su máxima capacidad intelectual, así como generar sentimientos de gusto hacia el colegio, asistir con ánimo, amar lo que lo rodea, convivir con amigos, consolidar sinergias con los compañeros, hacer amistad con los maestros, abrazar nuevos retos y motivarse a superarse cada día.
Se promueve la identidad nacional, la sensibilidad artística, el gusto por la cultura, la actividad física, la curiosidad científica, las habilidades tecnológicas y el amor por la naturaleza. Todo ello en un ambiente de confianza y cariño, promoviendo equilibrio y armonía con uno mismo, con los demás y con el entorno, buscando al mismo tiempo que el desarrollo académico y el compromiso por la búsqueda del conocimiento, el crecimiento psico-emocional para tener alumnos que saben mucho y que, sobre todo, son felices.
ECOLOGÍA (Sostenibilidad)
Las instalaciones del colegio son privilegiadas, únicas. El colegio está anidado en su propio bosque, a lo largo de más de 30 mil metros cuadrados de extensión tenemos espacios estéticos y funcionales para desarrollar plenamente actividades académicas, deportivas, artísticas, culturales, sociales, científicas, tecnológicas y de cualquier especie.
Desde su concepción y origen, el colegio ha buscado imbuir y contagiar de una pasión por la ecología y fomento de la sustentabilidad, lo cual es percibido como una gran fortaleza que identifica a diversas generaciones de exalumnos, que siempre coinciden en señalar esta como una característica distintiva del colegio, y que también los distingue a ellos y a su círculo de influencia, adoptando este espíritu ecológico en su ejercicio profesional, sus oficinas y sus hogares.
Esto no es solo una aspiración, los resultados de este propósito formativo se perciben en los concursos internacionales ganados por alumnos y demás actividades que inclusive propiciaron un reconocimiento de la Organización de las Naciones Unidas a la educación ambiental promovida por el Colegio Bilbao.
Desde la primera etapa, el impulso y liderazgo del colegio en esta materia llevo a la Secretaría de Educación Pública a ampliar el abanico de la oferta académica en asignaturas dentro de los programas de la Dirección General de Bachillerato.
Diversos apasionados profesores han pasado por aulas, laboratorios y el bosque del colegio, enseñando teoría, conduciendo prácticas, trasmitiendo conocimiento, invitando a reflexiones y contagiando su arraigado compromiso con la preservación de la naturaleza y la apreciación de sus maravillosos alcances.
Los salones de los más pequeños alumnos cuentan con invernadero propio integrado, periódicamente se llevan a cabo clases en el bosque, se promueven campañas de forestación en las que participan los alumnos, se planta y consume de un huerto que preparan los propios alumnos, se desarrolló y se mantiene funcionando un proyecto ecológico único de humedales, se trabaja una variedad de temas científicos en laboratorio, se imparten enseñanzas agropecuarias, en diversas etapas se ha tenido animales de granja bajo el cuidado de los alumnos, desde antes de que se generalizaran estas prácticas, en el colegio se clasifica la basura en diversas categorías, se recicla, se busca la captación pluvial y su aprovechamiento así como el ahorro de energía eléctrica; en fin, en el colegio siempre se está abierto a ampliar el catálogo de actividades ambientales.
El compromiso del colegio con la agenda verde, entendida como algo fundamental para el mundo y el bienestar humano, es algo que promovemos intensamente desde los preescolares para generar la conciencia necesaria que nos lleve a adoptar hábitos limpios y conductas tendientes a la sustentabilidad ambiental en nuestras vidas, a reducir la huella de carbono por cada individuo y entidad, todos los días.
Como parte de esto, tenemos un programa único de salud, pues nos entendemos como parte de la naturaleza con la cual interactuamos, y debemos cuidarnos también en forma integral.
Este ha sido un ámbito en el que el colegio ha tenido un liderazgo marcado desde su inicio, y ahora, cada vez más, buscaremos redoblar esfuerzos en esta ruta por amor a la vida y la sustentabilidad.
CULTURA DIGITAL
El Colegio Bilbao fue pionero de la educación de computación, informática y tuvo un lugar importante en el liderazgo y diseño de programas dentro de la Dirección General de Bachillerato durante años.
El avance tecnológico ha ido impulsando múltiples ajustes en el mapeo curricular, y el equipamiento de salones, infraestructura y estrategias didácticas. Esto es una constante, de lo contrario, la institución que no se compromete con ello se condena a sí misma a la pronta obsolescencia.
Anteriormente, fuimos de las primeras escuelas en tener laboratorio electrónico de idiomas, biblioteca digital con el programa de Alexandria, un cuarto con CD-ROM interactivo, introdujimos las primeras computadoras personales con acceso a Internet, cuando estuvo disponible se introdujo fibra óptica, no obstante, las nuevas tecnologías han dado paso a equipamiento más sofisticado, lo cual hemos implementado en todas las aulas del colegio.
Adicionalmente, ahora tenemos laboratorios de cómputo, un salón de computadoras personales con Windows y otro con Mac de Apple, todos los salones del colegio están equipados con pizarrones inteligentes, proyectores, tenemos un aula virtual con todo el equipamiento y las facilidades para generar contenidos académicos o impartir clases a distancia.
Durante la emergencia sanitaria, para todas las secciones, implementamos clases virtuales con éxito y aceptación. El Proyecto de ampliar esta forma de trabajar va avanzando de manera acelerada y aún no imaginamos el techo de los alcances totales de esta posibilidad que hoy es una realidad y que en nuestra visión es un objetivo concreto en franco desarrollo.
Estamos en posibilidades de desarrollar programas a distancia e híbridos, que ampliaran la oferta académica y multiplicaran los alcances del trabajo que hacen los profesionales a nuestro servicio.
Tenemos profesores especializados que están capacitados para guiar el desarrollo de habilidades tecnológicas, comunicativas e informáticas en todos los grupos etarios del colegio, construyendo sinergias con personal multidisciplinario para consolidar enfoques integrales.
Hay clases de robótica y se trabaja con diversos paquetes computacionales, bases de datos, aplicaciones en la nube, Páginas Web, podcasts, programación, operación y diseño. No obstante, el enfoque de la enseñanza de la informática busca promover esquemas creativos, productivos, interactivos y no un simple aprendizaje tradicional del uso parcial de paqueterías comunes. Se buscan promover habilidades digitales y capacidades para interactuar con la tecnología disponible hoy y la que vendrá mañana.
Existen diversos programas de utilización de medios digitales para la comunicación, educación y evaluación. Se busca promover en toda la comunidad la cultura digital y aprovechar sus bondades y su utilidad en todos los procesos. El uso de idiomas y tecnología está presente en todas las asignaturas y nuestro personal es capacitado constantemente para estar siempre a la vanguardia.
Destacan las clases de fotografía y video, edición, cine, y otras que fomentan expresiones artísticas, culturales, creativas, todas ellas apoyadas por un componente tecnológico importante.
Los alumnos y los maestros del colegio, participan activamente de la creación de contenidos académicos que pueden producirse, editarse, compartirse y utilizarse en diversos contextos.
Más allá de certificaciones y habilidades específicas, nuestros alumnos desarrollan herramientas útiles para su ejercicio académico y profesional, están insertos en la revolución tecnológica y pueden incursionar en la inagotable innovación que abre puertas que hace años no podíamos ni imaginar.
De cualquier manera, seguiremos revisando el programa para darle mayor impulso, permanentemente comprometidos a implementar nuevas plataformas de generación de contenidos y trabajo a distancia para siempre aspirar a avanzar a la vanguardia de desarrollo de esta importante área del desarrollo y no quedarse atrás del vertiginoso progreso tecnológico.
La reciente emergencia sanitaria ha adelantado este propósito y pronto anunciaremos grandes proyectos inscritos dentro de este ámbito fundamental para el desarrollo integral de nuestros alumnos.
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